domingo, julio 16

DE NUEVO CON JUAN SANDOVAL PAREDES



Dos aspectos de la administración Sandoval:Exhibimos en equipo vial que adquirió la MUNICIPALIDAD EN CUANTO ASUMIÖ Don Juan . Una comosición fotográfica que hizo estar frente a frente a dos Sandovales .Las expresiones y actitudes muestran como se complementan ,
Las imágenes de arriba pertenecen a las páginas 23 y 24 de la Revista "ALTALUZ" Nº 8 , versión física de Abril 1996 .
Las mostramos porque vamos a transcribir otro de los aciertos columnarios de Don Juan Sandoval Paredes. Y queremos brindarle un homenaje en ese sentido.
Esta vez ese espacio exhibe su pensamiento , muy original de varias situaciones urbanas puertomontinas. Después de referirse a los casos que él estima había que señalarlos ,desemboca en lo que hemos comenzado a promover ,para crear conciencia sobre proyectos que pretenden urbanizar Tenglo e integrarlo al Desarrollo Efectivo de Puerto Montt.
Permítanme explicarles , que personalmente , nos agrada la originalidad . Por ello buscamos en nuestra BASE DE DATOS una referencia diferente para señalar al autor del espacio que nos ocupa en esta ocasión .
Agradecemos a Don Juan nos haya nombrado en su inserción. Y lo hacemos en nombre de la Corporación Hijos de Puerto Montt Sede Santiago, entidad que me está apoyando en la iniciativa en que estamos abocados .
La Columna de marras va en seguida textualmente , la que hemos transcrito desde el Diario El Llanquihue del Sábado 15 recién pasado

Urbanicemos Tenglo

Por Juan A. Sandoval Paredes, ex alcalde y concejal.

"""Nos asombra que los terrenos del centro de nuestra ciudad sean de los más valiosos del país. Así se conoció hace unos días, por una transacción de un sitio de calle Varas con Cauquenes. Los entendidos lo aducen a que nuestro centro es pequeño, y que las "manzanas" están lejos de ser las cuadras de otras ciudades. A ello se suma que la nuestra es una de las ciudades más pujantes del país.
Las poblaciones nuevas se van extendiendo a kilómetros del centro, especialmente para los sectores de más bajos ingresos. Ya ni siquiera se construye cerca del Alerce histórico, sino que se va yendo hacia la cordillera. Las grandes inmobiliarias también lo hacen muy a la periferia, incluso se va a construir junto a la nueva cárcel de la ruta a Pargua, lo que echa por tierra el concepto de que estos recintos punitivos debieran estar alejados de las poblaciones, tanto por seguridad como por estética.
Como lo escribiera el poeta Juan Ramón Jiménez, nos iremos todos, pero "el pueblo se hará nuevo cada año". Con esto quiero decir que debemos pensar nuestro desarrollo para las nuevas y futuras generaciones, porque en algunas décadas más, seguramente nuestra población se va a multiplicar quizás por cuánto. Desde el terremoto del sesenta se ha quintuplicado la población. Lo más lejano del centro eran las chacras de Lintz por el oriente y las casonas de la gente de mar por el sur, aledañas a Angelmó.
Acogiendo el clamor de muchos hijos de esta mi ciudad-puerto, preocupados por el bienestar de sus hijos y de los hijos de sus hijos (valga la redundancia), entre otros de mi amigo Jerjes Olavaria, antiguo periodista radicado en Santiago, me permito "soñar un soñito", como reza una canción medieval castellana, y pedirles a mis vecinos que dirijan su mirada hacia nuestra hermosa y cercana isla de Tenglo, la que a veces no vemos por tenerla tan encima y que está prácticamente en el abandono.
Desde luego que compete a profesionales idóneos estudios acabados para planificar el uso y provecho adecuados que habría de dar a las extensas explanadas que van desde la Cruz, símbolo de quienes nos sentimos cristianos, hasta frente a los astilleros de Chinquihue. Es de Perogrullo señalar que lo primero sería construir el puente, cuyo costo sobrepasa en estos momentos el valor de todos los terrenos de su explanada superior, por lo que habría que entrar a expropiar, para después de pensar en levantar en sus paradisíacos espacios universidades con hermosos parques, la Intendencia Regional o incluso el hospital de última generación, que tanto anhelamos. Imaginemos a nuestros niños y jóvenes trotando o pedaleando entre plantas y árboles autóctonos, en vez de estar tragando comida chatarra o en los centros comerciales, como lo hacen hoy.
La comunidad organizada, con sus autoridades respectivas a la cabeza, ya debería comenzar a planificar el futuro de nuestra isla, como lo hizo Valdivia con su isla Tejas. Toda caminata, por grande que sea la distancia a recorrer, comienza con el primer paso."""

Ha redactado y trasncrito
J E R J E S

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